¿Alguna vez has dado por sentado lo que alguien estaba tratando de decirte, solo para darte cuenta después de que estabas equivocado?
Esto sucede más de lo que imaginamos, y las consecuencias pueden ser mayores de lo que pensamos. Cuando asumimos sin confirmar, abrimos la puerta a malentendidos, errores y, en algunos casos, hasta oportunidades perdidas.
En proyectos tecnológicos o al desarrollar una idea de negocio, las suposiciones pueden dañar un plan perfectamente estructurado. Por ejemplo, ¿te imaginas interpretar mal las necesidades de un cliente por no hacer preguntas claras? Eso puede resultar en un producto o servicio que no cumple con las expectativas y genera insatisfacción. ¡Todo por no haber confirmado!
Además, cuando no somos claros en nuestra comunicación, arriesgamos transmitir información errónea o incompleta. Esto no solo nos hace menos efectivos como líderes o miembros de un equipo, sino que también puede retrasar el progreso de un proyecto o incluso costarnos la confianza de los demás. Y aquí viene lo delicado: las relaciones interpersonales, esas que son clave para el éxito en cualquier ámbito, se pueden ver seriamente dañadas. Imagínate que alguien asume algo sobre ti, sin preguntarte primero; es probable que sientas desconfianza o hasta cierto malestar.
Lo peor de todo es que este mal hábito, también puede costarnos oportunidades importantes. En el ámbito del emprendimiento y la tecnología, donde las decisiones rápidas y precisas son cruciales, no verificar datos puede significar tomar el camino equivocado y desperdiciar tiempo y recursos valiosos. Verificar cuál es el hecho, despeja cualquier duda y evita malos entendidos.
Por suerte, hay maneras de evitar caer en este círculo de suposiciones. Te recomiendo:
Practicar la escucha activa nos permite captar el verdadero significado de las palabras de los demás.
Hacer preguntas no solo nos ayuda a despejar dudas, sino que también demuestra interés genuino. Y tomarnos el tiempo para confirmar antes de actuar puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso de nuestros proyectos.
Así que la próxima vez que estés frente a una decisión importante o trabajando en equipo, recuerda: no hay nada más poderoso que una comunicación clara, precisa y libre de suposiciones.
Al dejar de asumir y empezar a escuchar, podrías abrir las puertas a nuevas ideas, conexiones valiosas y un éxito que jamás habías imaginado.
Antes de terminar, te invito a reflexionar sobre tu comunicación diaria. ¿Cuántas veces asumes cosas sin confirmarlas? ¿Qué impacto tienen esas suposiciones en tus relaciones, tu trabajo o tus proyectos personales? Tomarse un momento para cuestionar estas suposiciones puede marcar una gran diferencia en tu vida.
Si sientes que este hábito está causando problemas en tu comunicación y deseas mejorar, ¡no estás solo/a! Estoy aquí para ayudarte a desarrollar prácticas más efectivas y a liberarte de las suposiciones que frenan tu crecimiento. No dudes en comunicarte; juntos podemos dar pasos hacia interacciones más claras, precisas y enriquecedoras.
Hasta la próxima.
Dalia Borges: Coach Ontológico e Inteligencia Emocional | Psicopedagoga Transformacional
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